Las dudas del crimen de Dana Leonte

Los indicios contra Sergio Ruiz acusado del asesinato de su novia Dana Leonte son abrumadores pero no definitivos hasta que los laboratorios de la Guardia Civil los confirmen.

No se ha podido demostrar con certeza que hubiera sangre de Dana en la escena del crimen y, de momento, el informe de los teléfonos no es tan exacto como asegura el auto. “No han demostrado nada” insiste el abogado del acusado. Además hay ADN de un segundo varón en la escena del crimen.

La Guardia Civil describe a Sergio como una persona mentirosa y violenta incapaz de contenerse. Lo cuentan los familiares de Sergio, su ex mujer y hasta su hermana. Sin embargo, hay denuncias por agresiones y amenazas cruzadas entre unos y otros. El móvil, según el sumario del caso, serían los celos y el temor a que Dana le abandonara. Sergio por violento podría matarla. Los mensajes cruzados el mismo día de la desaparición entre Dana y Sergio, borrados por este último, apuntan a que Dana amenazaba con abandonar a Sergio. Ya, pero no era la primera vez. “Indicios pero no pruebas sólidas”, repite el abogado, puesto que lo importante no está demostrado.

No hay sangre

Dice la investigación y el juez que Sergio mató a Dana con un palo. El palo tiene ADN y un pelo incrustado de Dana en su parte más gruesa. ¿Es sangre lo que hay en el palo? Según el sumario, hasta ahora no se ha podido demostrar que fuera sangre. La Guardia Civil encontró el palo en el recibidor de la casa, a la vista de cualquiera. La defensa de Sergio cree que todo esto sólo demuestra que Dana usaba ese palo para jugar con el perro de la pareja. Lo cierto es que no se puede demostrar que la matara con ese palo mientras no haya una autopsia del cadáver del que sólo se han hallado hasta ahora algunas muestras óseas en el monte. Las últimas, hace unas horas.

Dice el auto del juez que “la envolvió en un edredrón y la arrastró por la escalera, malherida o muerta, hasta el coche para deshacerse del cadáver”. Se apoya en que el perro experto en cadáveres marcó varios puntos de la casa y hay manchas rojizas que apuntan sangre.

Por su parte, los informes de la Guardia Civil en el sumario dicen que no se ha podido confirmar que los restos en edredón, almohada, escalera y demás… sean de sangre. Los informes son taxativos: la única sangre que hay es la de Sergio en una toalla del baño. El abogado Juan José Moreno apunta “¡cómo no va a haber ADN de Dana mezclado con el de Sergio, si vivían juntos!”. Para colmo en la escalera hay ADN de otro varón.

Es decir, hasta ahora mismo no hay certezas de cómo muere Dana ni de que hubiera sangre de la víctima. La Guardia Civil puntualiza que Sergio limpió a fondo la casa con lejía y los restos biológicos están tan degradados que sólo se puede saber que son ADN de Dana pero no su sangre.

Posicionamientos inexactos

Sergio dice que en el momento supuesto en que se comete el crimen de Arenas está en Velez y Dana se había marchado. La juez dice que Sergio miente, porque los teléfonos de ambos están a la hora del crimen a la vez en la casa que compartían en Arenas. El informe de la Guardia Civil lo corrobora. El matiz es que en Arenas sólo hay un repetidor que da cobertura a una gran extensión de terreno. El abogado dice que se necesitan «tres repetidores para triangular con exactitud un teléfono. ¿Cómo saber exactamente dónde estaban esos teléfonos en el momento del crimen? Podían estar en la casa, o en cualquier otro punto del pueblo y no necesariamente juntos”, señala.

El testigo 

Para terminar de enredar el asunto, el empleado de una gasolinera cercana dice que vio a Dana cuando, según la Guardia Civil, ya había sido asesinada. La vio cerca de la gasolinera y dos individuos que ocupaban un Peugeot gris la secuestraron.

Estas son las cartas que va a jugar Sergio Ruiz a su favor según el sumario al que ha tenido acceso OKDIARIO pero lo cierto es que la partida no ha terminado. La Guardia Civil ultima nuevos informes para demostrar que los restos de la casa de Sergio son sangre de Dana y, de momento además de los perros los reactivos lo confirman pero no es suficiente para asegurarlo. Lo mismo ocurre con los teléfonos, los investigadores ya anuncian en el sumario que, tras hacer una copia de la tarjeta telefónica de Dana, están preparando un informe mucho más concreto que pondrían a Sergio en evidencia y corroborarían todos los demás indicios y mentiras del acusado.